Un camino seguro para mantener el amor matrimonial es saber construir un futuro incierto, entre los dos, desde la admiración.
Admirar a tu esposa es poder contemplarle y saber rápidamente qué te enamoró de ella; es decir, quién es hoy para que seas tan feliz al lado de esa persona.
¿Qué te gusta más de ella? ¿Cuáles son sus sentimientos que más te agradan? ¿Qué actitudes, hábitos y conductas de ella te hacen sentir mejor?
Pasemos a la acción: Coge un boli y un folio en blanco. Enciérrate y piensa en ella. Y en positivo, hazte estas preguntas y rellena un folio. No importa si son cosas pequeñas. Examina todos esos aspectos que te encantan de ella y escríbelos. Luego, pídele a ella que haga lo propio. Y luego, compartid lo que está escrito. Díselo. Dile que te agrada aquello y lo otro. Y agradéceselo.
A partir de entonces, centrarte en lo mejor de ella será una estrategia clave para mantener el aprecio que le tienes, que es muy real y probablemente más verdadera que esas historias que te creas cuando le echas a veces en falta alguna cualidad, virtud o actitud.
Finalmente, si ella te confiesa varios aspectos que le gustan de ti, ¡procura mantenerlos! Porque está claro que ella no querrá olvidarlos para compensar mentalmente ciertas carencias que pueda percibir de ti.
¿Te atreves a empezar tú a asegurar la admiración en tu matrimonio?
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